"Si me cruzo con Gisela la saludaría"

6Tula Rodríguez rompió su cura de silencio y decidió contar su verdad a OJO para reafirmar que hoy es una mujer que no le tiene miedo a nada. Confiesa que su hija Valentina la ha cambiado, que el matrimonio no le quita el sueño y que si se encontrara con Gisela en un centro comercial la saludaría, porque 'lo cortés, no quita lo valiente'.
-Cinco años al frente de tu spa qué viene ahora para ti? Ni yo misma lo creo (risas). Empecé con un negocio en un espacio que me alquiló Marco Antonio en su local de San Isidro y ahora ya tengo tres y hoy inauguro otro en Iquitos. Estoy muy feliz. He pensado en abrir un gimnasio, pero será a largo plazo.
-Qué ofrece tu negocio en comparación al de Gisela Valcárcel? Ja ja ja... bueno, no voy a dar nombres pero una vez una cliente de ese local vino al mío y me preguntó qué le ofrecía para quedarse. Le dije que mejor precio y atención esmerada. Mi spa es del pueblo, aquí se le da el mismo trato a una persona que vive en Comas o en La Molina.
-Cuánto ha crecido Tula en los últimos años? Muchísimo y en todos los aspectos. Ahora puedo darme el lujo de no hacer TV y de vivir de mi negocio, dedicarme a mi familia. Ya no me atormenta lo que sale en un diario o hablan de mí. Vivo y duermo para mi hija, ella es la que me ha cambiado por completo. Pero no puedo negar que cuando me sacaban el ancho en los diarios me afectó en algún momento. Ver a tu madre enferma, tus sobrinos que en el colegio se burlen de ellos. Mi hermano en la universidad, todo fue muy doloroso.
-Qué fue lo que más te dolió? Que me señalen con el dedo y me digan cosas que no son. Yo no le hice daño ni le quite nada a nadie.
-Mucha gente pregunta: por qué le sigues los pasos a la señora Valcárcel?, piensan que es una obsesión.
¡Mentira! La mayoría de las personas en este medio venimos de lugares populares y muy pocas son las que destacamos. Eso pasó conmigo y con ella. Si pensé en poner un negocio relacionado con la estética fue por mi familia, arrancó de una aventura y mírame ahora. Nada tiene que ver la obsesión porque si pensara así, diríamos lo mismo de Delly Madrid o Jeanet Barboza que también están en el mismo rubro. Sólo que la prensa lo asume de esa manera porque lo mediático vende y está bien.
-Estás convencida de que Javier Carmona se quedará toda la vida contigo? Estamos en proceso de consoli-darnos, yo no te puedo decir que me voy a quedar siempre con él. El se ha casado dos veces y dice que en las dos juró amor eterno y todos saben lo que pasó.
-Eres consciente que puede irse de tu vida...
Por supuesto, yo no me puedo cerrar a esa posibilidad. Lo único de lo que estoy segura es que la mitad de ese hombre es mi hija. Lo que pase en nuestra relación nadie lo sabe, pero por ella siempre vamos a estar juntos y eso escríbelo. Es un excelente padre, nunca me verás yendo a un juzgado a reclamar por alimentos porque en eso sí pongo las manos al fuego por él. Estoy convencida de que Javier Fernando Martín Carmona del Solar es un hombre a carta cabal. No es un hombre de una noche placentera o que con el que sólo puedes salir a juerguear.
-Sueñas casarte con él? De chibola pensaba en el matrimonio porque es la ilusión de toda adolescente, pero cuando maduras todo cambia porque te das cuenta que hay cosas más importantes. Un papel firmado no es un seguro de nada, y la verdad, sale más caro divorciarse (risas).
-Quieres otro hijo? Yo creo que no, Javier tiene tres. Como que ya caminó bastante creo (risas). Y yo ando en otra onda, la de mis negocios y darle todo a mi hija.
-Si la vida te diera la oportunidad de volver a elegir al padre de tu hija, Por qué dices que volverías a escoger a Javier Carmona? Porque es un excelente papá, un hombre a todo dar.
-Qué pasaría si te cruzas en un spa o un centro comercial con Gisela? Estoy convencida de que la señora está tranquila y sin ningún inconveniente conmigo, así como yo con ella. De verdad yo creo que es un tema mediático, ella debe de vivir tan feliz que no creo que me tenga cólera.
-Le pasarías la voz? Bueno, lo cortés no quita lo valiente. Yo no tendría ningún inconveniente en saludarla.
-Y si te llaman a su programa, irías a bailar? Yo no me he visualizado en el programa. Bien difícil porque no creo que me llamen, pero bueno, si quisieran que hagan la prueba. Además su productor ha sido el mío. Nada está dicho, uno debe dejar las cosas abiertas siempre.
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