Crimen de chofer no fue “por error”

Los tres presuntos sicarios que asesinaron de doce balazos al chofer Carlos Alberto Machuca (56) en la puerta su casa en San Juan de Lurigancho, confesaron a la policía que el crimen se debería a un tema familiar.

“Él ya sabía lo que iba a pasar. Teníamos que matarlo, las balas iban para él”, reveló a los agentes el presunto sicario Rodrigo T. O. (17), capturado junto a Junior Edgar Campos Huaranga (19) y el chofer del vehículo donde iban a fugar, Jefferson Páucar Sinche (23).
Los sujetos estaban a bordo de un auto de placa A7C-322, donde se les encontró dos armas. 

Según informaron los investigadores, el revólver y la pistola que se les incautó a Rodrigo y Edgar Campos, habrían sido alquiladas en el mercado La Cachina de San Juan de Lurigancho. “Pagaron 150 soles por cada arma. Allá se encuentra de todo”, informó un agente de la PNP.

Los presunto sicarios confesaron también a la policía que pagaron doce soles al chofer Jefferson Páucar Sinche para que les hiciera el servicio de taxi durante 10 minutos. Los investigadores corroboran estas nuevas versiones.