Ejecutaban sus sanguinarios delitos con total ferocidad y tranquilidad, convencidos de estar protegidos y avalados por las fuerzas oscuras del más allá.
Y es que “Los Sanguinarios del Comité 7″ rezaban y se encomendaban a una calavera para asegurar el éxito de sus crímenes por encargo, informó la Policía que los detuvo en un operativo realizado la noche del último sábado.
Abraham Sánchez Guerra, Andrea Requena Romaní y Armando Guerra León cayeron con dos armas, drogas y el cráneo humano que adoraban, en un búnker ubicado en la zona de Caja de Agua, en San Juan de Lurigancho.
“Estos sujetos se dedicarían al sicariato. Se ha encontrado una calavera a la que se prendía una vela con el fin de no ser capturados”, dijo a los medios el coronel PNP Walter Palomino, jefe del Escuadrón Verde, unidad que atrapó a los maleantes.
TATUAJE
El jefe policial señaló además que la devoción por la muerte era tal, que uno de los detenidos incluso tenía en el pecho el tatuaje de una calavera humana y una pistola.
Dos de los detenidos tienen un amplio prontuario.
Según se indicó, Armando Guerra León purgó condena por robo agravado entre los años 2010 y 2017. Asimismo, Abraham Sánchez Guerra estuvo recluido en 2020 y 2023 por homicidio y extorsión, respectivamente.
La Policía además investiga si Andrea Requena Romaní también está involucrada en una serie de delitos.
OJO AL DATO
“Los Sanguinarios del Comité 7″ cayeron en un megaoperativo desplegado por la Policía en San Juan de Lurigancho.
