Una joven denunció a una cirujana plástica por haberle dejado sus piernas y glúteos en mal estado, por una intervención ocurrida en 2019. En su defensa, la Dra. Kalieska Arroyo indicó que la paciente no continuó con las sesiones tras la cirugía. La joven contó que su piel presenta hundimientos y zonas oscuras por lo que decidió no volver. Según la cirujana, la cirugía fue una especie de “canje” en agradecimiento por los vestidos que le confeccionaba la joven: “era una cortesía lo que estábamos haciendo con ella”. | América TV