¿A quién no le ha pasado? Ves a un nuevo chico que físicamente te atrae, empiezas a investigar sobre él y cumple con todas tus expectativas (¡qué emoción!), hasta que planeas el acercamiento.
Empiezas a tratarlo y no sabes qué vaya a pasar, pero sigues encantadísima con él, así que todo marcha bien por ahora. Continúas frecuentándolo, parece que por fin te invitará a salir, así que esperas pacientemente.
Y de pronto, aparece un nuevo personaje en la historia. Una chica que no sabes cómo pero hizo que la invitara a salir rápidamente, y de pronto los ves iniciando una nueva relación.
Te quedas en silencio y te preguntas para ti: "¿Por qué soy tan piña?", y te culpas pensando que tienes muy mala suerte, sobre todo con los galanes. ¡Tranquila! Toma las cosas con calma que ya llegará el hombre para ti.
No te apures y cuando menos creas ¡ahí estará! Esperando a que aceptes salir con él y compartas un poquito de tu tiempo a su lado.
[También te puede interesar leer: "Volver a creer en el amor"]