Decenas de niños y adultos mayores afectados con enfermedades respiratorias que amenazan su salud; su principal medio de vida, la actividad agropecuaria, en jaque por los daños reportados; y necesidades básicas sin cubrir, como el acceso al agua o a la atención médica.
Estas son las consecuencias de las bajas temperaturas que viene soportando la población de Puno debido a la presencia de heladas en el país y que, según el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi), han descendido hasta los -11 °C (en la estación Pampahuta, Paratía), el último domingo.
Este drama que enfrentan los puneños puede replicarse en otros lugares, pues el Centro Nacional de Estimación, Prevención y Reducción del Riesgo de Desastres (Cenepred) estimó que 2′251,580 a los habitantes expuestos a un riesgo “muy alto” frente a las temperaturas mínimas previstas para el trimestre de julio a septiembre de 2023.
detalles. En su diagnóstico, el organismo precisó que los ciudadanos vulnerables viven en 1728 centros poblados distribuidos en 12 departamentos a nivel nacional. Sin embargo, se focalizan en Junín, que alberga al 36 %, y Áncash, Puno y Huancavelica con 17.5 %, 16.5 % y 13.5% respectivamente.
Asimismo, proyectó que presentan este mismo nivel de peligro un total de 610,864 viviendas, 1728 establecimientos de salud, 8560 instituciones educativas y 1′123,240 hectáreas de superficie agrícola.
OJO AL DATO. El Cenepred detalló que hay 227,779 menores de 5 años y 264,311 adultos mayores en riesgo a contraer males respiratorios.
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