Aurora Caruajulca

En el mes de agosto, la Policía Nacional del Perú (PNP) recibió un total de 2500 denuncias de extorsiones en la capital. Estas denuncias se agrupan en nueve modalidades diferentes: la extorsión esporádica, intermitente, sistemática, chalequeo, gota a gota, gota a gota virtual, cobro de cupos y cuotas, préstamos por aplicativos informales, y el “escopetazo” o extorsión desde cárceles.

Entre los detenidos por este delito, son los ciudadanos extranjeros quienes juegan un papel significativo. Según la data de la Policía a la que OJO tuvo acceso, el 40 % de los extranjeros detenidos por extorsión son venezolanos, otro 40 % son colombianos y el 10 % son ecuatorianos.

MODALIDADES. Una de las modalidades más conocida es la del “chalequeo”, que consiste en el cobro por un servicio de seguridad ficticio. Las organizaciones criminales que lo practican brindan “protección frente a amenazas” que ellas mismas generan. Este método suele estar encubierto bajo la fachada de empresas de seguridad.

El “gota a gota” es otra modalidad ampliamente denunciada. Se trata de un préstamo informal que al principio parece un simple caso de usura, pero que al no poder ser pagado, se convierte en extorsión. Quienes no logran cumplir con los pagos se enfrentan a amenazas violentas por parte de las mafias que controlan este esquema.

El “gota a gota virtual” sigue una lógica similar, pero se realiza a través de plataformas digitales como WhatsApp o redes sociales. Al incumplir los pagos, las víctimas son sometidas a amenazas psicológicas y físicas, que pueden extenderse a familiares y amigos.

En el sector de la construcción, el cobro de “cupos y cuotas” es frecuente. Aquí, los sindicatos de fachada exigen cupos para trabajadores relacionados con su organización. Este método se ha extendido a otros sectores, como el transporte y la prostitución.

Otra modalidad son los aplicativos informales de préstamos. Aquí, los delincuentes usan datos personales de las víctimas obtenidos de sus celulares, incluso si no han solicitado un préstamo formalmente. Estos datos son empleados para extorsionar tanto a las víctimas como a sus contactos cercanos.

La modalidad del “escopetazo” o extorsión desde cárceles se basa en el envío masivo de mensajes extorsivos desde prisiones. Las víctimas son acosadas constantemente por los extorsionadores, quienes manejan múltiples casos a la vez desde sus celdas.

El especialista en seguridad ciudadana, Juan Bustamante, recomienda a la población que “se mantenga alerta frente a mensajes sospechosos y que no brinde información personal a desconocidos. Denunciar a tiempo puede ser clave para evitar mayores consecuencias”.

Además, es fundamental no ceder a las demandas extorsivas, pues “hacerlo solo alimenta estas redes criminales”, añade.

La PNP dispone de varios canales para denunciar las extorsiones. Uno de ellos es la: Línea 1818, donde brindan los pasos para reportar el hecho y así los agentes puedan dar con los delincuentes.

9 MODALIDADES DE EXTORSIÓN EN EL PAÍS


“GOTA A GOTA”


De las 3060 denuncias recibidas entre el 21 de abril y el 30 de junio de 2023, 463 (15,13 %) fueron por extorsión en modalidad de préstamos “gota a gota”. Superan, así, a las 441 denuncias de crimen organizado (441 o 14,41 %) o a las 15 por otras modalidades de extorsión (0,49 %).De las denuncias recibidas, 57 % se registraron en Lima, 6,91 % en el Callao, y 6,05 % en Piura.


EN SOLO AGOSTO se registraron 2500 DENUNCIAS ante la Policía. Delito mantiene en vilo a los peruanos


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