El Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social y el Programa Mundial de Alimentos realizaron el informe Perú: Evaluación de la Seguridad Alimentaria ante Emergencias (ESAE), en el cual se muestra que la inseguridad alimentaria afecta al 51.6% de los hogares peruanos, es decir, aproximadamente 1 de cada 2 hogares podría estar en inseguridad alimentaria en 2023.

“La inseguridad alimentaria nos preocupa a los nutricionistas, ya que significa que la población está comiendo menos, está comiendo mal o no está comiendo. En Lima Metropolitana, esta situación afecta al 39.5% de los hogares. Es decir, Lima Metropolitana es el área con el mayor número de hogares en inseguridad alimentaria, con 1.04 millones de hogares”, manifestó Jessica Huaman, decana del Consejo Regional de Lima Metropolitana del Colegio de Nutricionistas.

Además, la especialista comenta que esta situación podría incidir en el incremento de la malnutrición en la población más vulnerable. “En Lima Metropolitana, el 34.7% de los niños de 6 a 25 meses de edad tiene anemia, mientras que el 4.8% de los niños menores de 5 años sufre de desnutrición crónica. Esta situación podría agravarse si la inseguridad alimentaria aumenta en los hogares de nuestra ciudad”, advirtió Jessica Huaman.

Por último, la nutricionista manifiesta la necesidad de tomar medidas para reducir la inseguridad alimentaria en Lima. “La existencia de ollas comunes, predominantemente en Lima Metropolitana, es un signo de que miles de personas aún requieren asistencia alimentaria del Estado para cubrir sus necesidades nutricionales. Sin embargo, también es necesario promover prácticas de alimentación sostenible y dinamizar la economía para superar la inseguridad alimentaria en las familias beneficiarias de dichas organizaciones sociales de base”.

Cabe resaltar que el Consejo Regional de Lima Metropolitana del Colegio de Nutricionistas está dispuesto a promover un trabajo conjunto con los gobiernos locales. Por ello, está incidiendo en los diferentes municipios para que prioricen el cumplimiento de los compromisos asumidos para la reducción de la malnutrición infantil, así como la incorporación de nutricionistas.

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