Aurora Caruajulca


El sector de las bodegas en Perú atraviesa una crisis sin precedentes. Este 2024, unas 7500 bodegas han cerrado sus puertas, no por falta de clientes, sino por el constante acoso de bandas criminales que operan mediante extorsiones y cobros de cupos.


Mercedes Quiñones, presidenta de la Célula Áncash de la Asociación de Bodegueros (AGREMUB), alerta que la delincuencia se ha convertido en el enemigo más temido por miles de emprendedores que, pese a los esfuerzos, no logran frenar la violencia que azota al sector.


A esto se suma la caída en ventas y el alza de precios, poniendo en jaque la supervivencia de miles de negocios familiares.


INSEGURIDAD. En una entrevista con diario OJO, Quiñones destacó que el 15 % de las 500 mil bodegas registradas a nivel nacional han sido víctimas de la delincuencia.

También explicó que las medidas de seguridad adoptadas por los bodegueros, como la instalación de cámaras, no han sido suficientes para detener la ola de la delincuencia.


“El principal motivo de los cierres ha sido la delincuencia. Muchas bodegas han sido atacadas pese a tener rejas y cámaras de seguridad”, declaró.


Además de la delincuencia, el sector de las bodegas enfrenta una baja significativa en ventas. Según la representante, los ingresos han caído hasta en un 20 % debido al alza de precios en productos como snacks, cervezas y gaseosas.


Dueños son amenazados de muerte por cobro de cupos.


Los bodegueros piden al Gobierno una tregua tributaria, la cual les permitirá paliar frente a la crisis económica.


debido a extorsiones y la delincuencia


7500 bodegas cerraron este añoMercedes quiñones Vocera de Agremub