Con una brecha aún amplia figura la cobertura del esquema regular de vacunación en el país, pues, según el Tablero de Información de Inmunizaciones del Ministerio de Salud (Minsa), hasta julio último casi todas las vacunas incluidas no fueron aplicadas ni a la mitad de la población meta.
Así, la vacuna BCG (que toma su nombre de la bacteria modificada que la constituye: el bacilo de Calmette y Guérin), a colocarse al recién nacido para prevenir formas graves de tuberculosis, la recibió el 48.6 % de los 480,726 que la necesitaban.
En tanto, aquella vacuna que les ofrece protección contra la hepatitis B (HVB) alcanza, según información oficial, apenas al 47.9 % de esa misma cantidad de bebés que la requieren.
La vacuna que se aplica contra las diarreas por rotavirus cubre al 48 % de la población meta y la pentavalente, que previene contra la difteria, tétanos, tos ferina (DPT), neumonía y meningitis, ha llegado solamente al 46.7 %.
La vacunas APO, contra la polio y que debe ser aplicada a niños desde los 7 meses hasta los 2 años, solo la han recibido el 47.7 % y 32.7 % de los indicados para ser inoculados, respectivamente.
El segundo refuerzo de la DPT 2, vacuna contra la difteria, el tétano y la tos ferina (pertusis), apenas se ha logrado aplicar al 33.9 % de la población meta.
En el caso de la dosis contra la varicela, solo la tiene el 46.3 % de los más de 509 mil bebés de un año que la requieren; mientras que la primera dosis de SPR (contra sarampión, paperas y rubéola) llega a 36.6 % de la población meta para ser vacunada.
OJO AL DATO. En poblaciones vulnerables, como adultos mayores y gestantes, el avance de vacunación requerido es también reducido.