Nueve de cada diez peruanos temen ser víctimas de un hecho delictivo en cualquier momento, según estudios del Instituto Nacional de Estadística e Informática (Inei). La percepción de inseguridad ha crecido este año con relación al 2023. Y es Lima Metropolitana donde los ciudadanos se sienten más desprotegidos (89.9 %). Es que la delincuencia se sigue expandiendo en todas sus formas. Los “cogoteros”, “raqueteros” y extorsionadores se desplazan sin mayor problema. Las bandas de “robacasas”, “robacarros” y “asaltabancos” están al acecho. Ni qué decir del sicariato y la trata de mujeres que cobran vidas a diario. Y los estafadores, que usan diversos medios para timar a sus víctimas, están por todos lados. Mientras redactamos esta columna nos informan que inescrupulosos, en las noches, roban los medidores de agua en un vecindario de Comas. En estos días se observa más agentes policiales en las calles y, ojalá, mejore la seguridad ciudadana.
