La trata de personas, delito que en el Perú registra 15 denuncias al día según el Ministerio Público, tiene como uno de sus más comunes fines la explotación sexual de las víctimas, que son sobre todo mujeres.

Esto, según un informe de CHS Alternativo, se concreta principalmente bajo la modalidad de la explotación de las relaciones remuneradas, que se realiza en las calles o vía pública, hoteles, departamentos, prostíbulos y locales fachada.

En la puesta en marcha de este ilícito, que implica la captación, el traslado, la acogida y la recepción de una persona, las organizaciones criminales asumen los gastos, pero luego se los cobran en efectivo a las víctimas entre el primer y tercer mes de su explotación sexual.

97 % de adolescentes justifica violencia en parejas

Esto hacen mafias como el “Tren de Aragua” y “Los Intocables de Lima Sur”, que a través de amenazas y violencia armada controlan las plazas de explotación sexual en Lima. Los montos de estas deudas oscilan entre los 15 mil soles en trata internacional y 3 mil soles en nacional.

AMENAZADAS. Además de dar estos detalles, el informe de CHS Alternativo revela que esta no es la única forma de operar de estos criminales. También se han apoderado de calles en la capital, donde toda trabajadora sexual debe pagar entre 200 a 250 soles semanales y, de no hacerlo, son intimidadas.

Los cobros son realizados en dinero en efectivo por mujeres cercanas a los tratantes, como lo hacía Alexandra Silva, alias “La Rusa” y presunta integrante de la organización “One Family”, con las trabajadoras sexuales en Lince.

Estas mafias de trata también cobran cupos a aquellas mujeres que ofrecen el servicio vía internet, luego de contactarlas y amenazarlas, y en los prostíbulos les exigen una suma semanal de 200 soles para que “no tengan problemas de seguridad”.

Este proceder delictivo se condice con lo denunciado por Angela Villón, presidenta de la Asociación de Trabajadoras Sexuales Miluska, Vida y Dignidad, quien refirió que los trabajadores sexuales están en una situación de vulnerabilidad.

OJO AL DATO. La venezolana “La Rusa” era la cajera del sanguinario “Chino”, acusado de extorsionar y asesinar a mujeres en nuestro país.

TE PUEDE INTERESAR: