Sandra (Villa María del Triunfo, 40 años). Doctora, mi familia no acepta a mi nueva pareja. ¿El motivo? Mis padres, mis hermanos y otros allegados aún siguen frecuéntandose con mi expareja y padre de mis hijos, a quien le tienen mucho cariño, pese a que yo llevo separada varios años.
Roberto, mi nuevo amor, es un hombre muy amoroso, detallista y servicial y lo conozco desde hace un año y medio. Su personalidad es todo lo contrario a Luis, quien me engañó, por lo que hace cinco años pusimos fin a nuestro matrimonio.
Pero parece que mi familia es quien “no olvida al ex”. Y cada vez que se celebra un cumpleaños o un paseo familiar lo invitan. Y lo peor, doctora, es que Luis acepta y se aparece y comienza a compartir. A veces siento que a mi familia no le importa mis sentimientos y todo lo que yo sufrí con su traición.
El último fin de semana, Luis vino a visitarme y llevó dos botellas de vino. Mi papá le hizo muecas y no se las recibió. Quise que en ese momento la tierra me tragase por tamaño desplante.
Luis se puso triste y se dio cuenta que, si fuera por mi familia, yo estaría nuevamente con el padre de mis hijos, quien por cierto aún no me quiere firmar el divorcio.
Roberto siente que mi familia no lo quiere ni lo valora. Y siento que a Luis esta situación a Luis le causa un gran ego. Si viera, doctora, cómo disfruta cuando mi familia hace a un lado a mi nueva pareja. No sé qué posición adoptar o qué hacer para que la relación sea más armoniosa entre Roberto y mi familia.
OJO AL CONSEJO
Querida Sandra prioriza tu bienestar y el de tu relación. Habla con tu familia desde el corazón, expresando cómo te afecta la situación y la importancia que tiene Roberto en tu vida. Hazles entender que, aunque valoras su cariño hacia Luis, es vital que respeten tu decisión y tu felicidad actual. Recuerda que la relación es tuya, y mereces que te apoyen en esta nueva etapa.