Nueve personas que habían iniciado una expedición a propósito de Semana Santa se perdieron en un cerro y fueron rescatadas casi 24 horas después por la Policía con ayuda de un helicóptero.
Raúl Saavedra Velazco, peruano que reside desde hace varios años en Holanda, había retornado al país para pasar la Semana Santa con sus amigos de universidad y familiares. En vísperas a estas fechas, su grupo decidió recorrer el Qhapac Ñan, más conocido como Camino Inca, desde Cieneguilla hasta Chaclacayo. Una extensa red de caminos utilizado por los antiguos peruanos aguardaba sus pasos.
Nueve personas, entre ellas el sobrino de Raúl, de apenas 12 años, se embarcaron en la aventura. Llegaron a bordo de autos hasta el Centro Poblado Rural de Santa Rosa de Chontay, ubicado a la altura del kilómetro 38 carretera Cieneguilla – Huarochirí, en Cieneguilla, y de ahí descendieron.
Luego, escalaron una de las montañas que se encontraban en esa localidad e iniciaron el trekking. “Llegamos a las 11 y 30 de la mañana del jueves y empezamos el camino”, precisó Saavedra.
La caminata estaba prevista que dure cinco horas, sin embargo, se extendió hasta casi las 8 de la noche, pues su guía “no conocía bien la zona”, según la Policía. La inclemencia del sol y las enormes rocas que se encontraban en el lugar dificultaron los pasos de estas personas, quienes a estas alturas ya estaban cansadas y, sobre todo, desorientadas. “Nos dimos cuenta que estábamos desorientados cuando la caminata se hacía demasiado larga y demasiado empinada. Habíamos estado bajando y subiendo hasta permanecer en la cresta de un cerro”, dijo Raúl.
Para suerte del grupo de excursionistas, la señal no se había ido pese a estar en las montañas. Algunos, incluso, contaban con batería en sus celulares y fue así que una mujer se comunicó al 105 para pedir ayuda. Efectivos de la comisaría de Cieneguilla, a bordo de dos patrulleros, se desplazaron hasta Santa Rosa de Chontay minutos después y emprendieron la búsqueda. “Subimos los cerros y estuvimos hasta altas horas de la madrugada, pero no pudimos ubicarlo, debido a lo agreste de la zona y a la oscuridad de la noche”, dijo el comandante Manuel Cama Campos, comisario de Cieneguilla.
Pese al frustrado rescate, la Policía estuvo en permanente comunicación con las personas extraviadas y les pidieron que permanezcan en el lugar, a fin de evitar algún tipo de accidente.
El grupo de amigos, que se encontraba sin abrigos, tuvo que pasar la noche en medio de la intemperie, sin bolsas de dormir y con pocas provisiones. “El principal problema para pasar la noche fue el frío y los mosquitos. Yo solo dormí un minuto”, recordó Raúl. “Nos estábamos quedando sin nada, solo habíamos traído provisiones para menos de un día”, agregó.
RESCATE DE PELÍCULA.
Al día siguiente, a plena luz del día, efectivos de la comisaría de Cieneguilla emprendieron nuevamente la búsqueda, esta vez con apoyo de personal de rescate del Escuadrón de Emergencia y con efectivos de la Dirección de Aviación Policial PNP, quienes acudieron a la zona con un helicóptero.
El comandante Cama se comunicó con las personas extraviadas “ni bien salió la luz”, según sus propias palabras, y acudió al lugar con el grupo de efectivos. Después de unas horas, al promediar las 10 de la mañana, se logró ubicarlos.
“El GPS fue clave para ubicarlos y la forma en la que han utilizado sus teléfonos. (Ellos) lo han apagado cuando han debido apagarlos. El helicóptero de Aviación Policial supo cuál fue su ubicación gracias a ello”, explicó la fuente.
Después de dar con la ubicación de las personas, el helicóptero se colocó en medio de una pendiente. Hasta allí, se dirigieron a pie y fueron evacuados de cuatro en cuatro. “El rescate ha sido una maniobra muy técnica, de película. El helicóptero se ha posado en una pendiente y así hemos tenido que subir”, contó Saavedra Velazco.
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