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Uno de los principales reclamos de los estibadores y carretilleros del Gran Mercado Mayorista, en Santa Anita, es la excesiva carga de mercadería. La Ley de Salud y Seguridad del Trabajo establece la carga máxima de 50 kilos, disposición que no se cumple en el citado centro de abastos.
La denuncia de los operarios fue confirmada por el comerciante del giro de ajos, Edgardo Altos, quien admitió que los sacos de mercadería sobrepasan los 50 kilos permitidos y que pueden llegar hasta 120 kilos de peso.
"Es cierto que se les hace cargar hasta 120 kilos, porque vienen productos demás en los costales...Es cuestión de tiempo y de que el Ministerio de Agricultura coordine para reglamentar bien y hacer valer eso", declaró el comerciante, tras precisar que de "ninguna manera" está bien dicha práctica.
El comerciante agregó que los estibadores y carretilleros "no tienen exclusividad" para operar en el Gran Mercado Mayorista, y que ellos tienen la libertad de contratar a personal externo.
"Los podríamos contratar a ellos, pero ponen tarifas altas, por saco cobran S/2 o S/2.50, y a los externos les pagamos lo normal, S/1, ya que el transporte es mínimo, 20 o 30 metros de distancia" dijo Altos.
De acuerdo con los operarios la excesiva carga les provoca problemas lumbares, que afectan toda el área de la columna vertebral, y hernias pélvicas.
En tanto, los operarios, que cumplen su segundo día de paro, se ubicaron al frente de la oficina administrativa de la Empresa Municipal de Mercados SA (EMMSA) y reclaman dialogar con las autoridades. Hay quienes piden la presencia del actual alcalde de Lima, Luis Castañeda, o del burgomaestre electo, Jorge Muñoz.
En un recorrido, este diario comprobó que los camiones de papas, camotes y otros tubérculos no han sido descargados ante la falta de estibadores y carretilleros.
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