Será muy saludable que el Ministerio del Interior y la Policía Nacional evalúen si el estado de emergencia vigente en San Juan de Lurigancho, San Martín de Porres, Lima Cercado, Lince y parte de Sullana (Piura) está trayendo los resultados esperados, pues hasta el momento, al menos en la primera de las jurisdicciones mencionadas, se ve que la cosa no avanza, al extremo que han asesinado al teniente gobernador y todos los días son reportados hechos de violencia. Si las cosas están complicadas, es necesario que se replantee la estrategia, si es que existe, para que la lucha contra el hampa se afronte con nuevos bríos. Se debe tener en cuenta que cada día que pasa sin que se tomen medidas efectivas, se pierden más vidas. Sin duda, un primer paso debe ser contar con una estrategia integral que comprometa a los diversos sectores que tienen que ver en la lucha contra la criminalidad. Por ejemplo, se han dispuesto hasta 30 años para los que roben teléfonos celulares, pero ¿se sabe en qué penal se va a meter a toda esta gente? Decimos, nomás.
El estado de emergencia en Lince se da ante elevada criminalidad.
