Diariamente, los peruanos soportamos la congestión vehicular que se registra en la capital, el cual se ha acentuado debido a las obras que se realizan en algunos puntos de Lima, como es el caso de la Línea 2 del Metro. Sin bien esta incomodidad es para que, en el futuro, esperemos no muy lejano, los ciudadanos podamos disfrutar de un mejor servicio de transporte público, lo que no estamos dispuestos a soportar más es la inseguridad que estas obras han ocasionado. Basta con tratar de cruzar a las 7 de la noche la av. Paseo Colón, hoy cerrada por las obras de la Línea 2, para ver que la zona es total oscuridad, donde los peatones están expuestos a los asaltos. La congestión vehicular también expone a los conductores a robos. Las autoridades deben destinar mayor patrullaje y presencia policial en las zonas afectadas por obras. Una buena iluminación también ayudaría a reducir los asaltos al paso. ¿Qué hacen las empresa concesionarias y el Ministerio de Transportes y Comunicaciones?
