El último viernes 2 de febrero, Chile declaró el estado de excepción por catástrofe por los incendios forestales que azotan en el centro y sur del país, además, las zonas turísticas como Viña del Mar en Valparaíso, donde al menos 12 personas habrían fallecido.
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La ministra del Interior, Carolina Tohá, informó en rueda de prensa que se han identificado 15 de las víctimas, asimismo, no descartó que el número de muertes pueda incrementarse con el transcurso de las horas.
La región de Valparaíso se encuentra en estado de emergencia, siendo la más afectada por su proximidad a áreas pobladas, a aproximadamente 80 a 120 kilómetros al noroeste de Santiago.
Actualmente, hay 92 incendios activos, con un aumento considerable de hectáreas incendiadas de 30,000 a 43,000 en tan solo dos días, y con fuegos acercándose peligrosamente a zonas urbanizadas.
Por ese motivo, el presidente chileno, Gabriel Boric, decretó “el Estado de excepción por catástrofe para disponer de todos los recursos necesarios” para combatir los fuegos.
“La situación de los incendios forestales especialmente en la quinta región es muy difícil por las temperaturas y vientos, pero sepan que estamos desplegados al máximo de las capacidades para enfrentar la emergencia”, añadió el mandatario.
El Comité de Gestión de Riesgos y Desastres (Cogrid), que congrega a distintas autoridades e instituciones públicas, estaba convocado para primera hora del sábado, pero debido a la gravedad de los hechos adelantó su reunión.
Los incendios coinciden con una de las olas de calor más intensas de los últimos años, con temperaturas que han rozado los 38 grados Celsius en la zona central.
