El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, afirmó hoy con motivo del Día de Jerusalén, que conmemora la toma de la Ciudad Vieja hace 50 años, que el Monte del Templo (Explanada de las Mezquitas) y el Muro de las Lamentaciones "permanecerán para siempre bajo soberanía israelí".
"Este logro histórico se mantendrá para siempre", declaró en la Knéset (Parlamento) , según el diario "Haaretz", durante un acto de conmemoración de lo que Israel considera la "reunificación" de la ciudad con la toma de su parte oriental, territorio ocupado desde 1967 que los palestinos reclaman como capital de su futuro estado.
Netanyahu volvió a poner sobre la mesa su petición del traslado de la embajada de Estados Unidos de Tel Aviv a Jerusalén, una promesa electoral que hizo el nuevo presidente de EEUU, Donald Trump, y que luego aparcó para concentrarse en tratar de impulsar un acercamiento entre israelíes y palestinos que pueda reactivar las negociaciones de paz, estancadas desde hace más de tres años.
"Jerusalén debe ser hogar de todas las embajadas, incluida la (norte)americana", incidió el primer ministro, una polémica decisión que supondría la aceptación por parte de EEUU de la ocupación israelí sobre la parte oriental.
El presidente israelí, Reuvén Rivlin, también se pronunció hoy con motivo de la festividad del Día de Jerusalén y aseguró que Israel "lo dio todo por Jerusalén porque sabía que sobre Jerusalén debía insistir", según una nota oficial.
"No ha habido ni hay otra realidad. Aquí, en estas piedras, late el corazón del pueblo judío. Jerusalén es el corazón del Estado de Israel, y el Kotel (el Muro de las Lamentaciones) es el corazón de Jerusalén", dijo Rivlin ante la explanada del Muro, el único vestigio del lugar más sagrado para los judíos, que estos denominan Monte del Templo y los musulmanes Noble Santuario o Explanada de Al Aqsa.
Miles de israelíes desfilarán hoy con banderas por la ciudad para entrar en el barrio musulmán de la ciudadela amurallada y atravesarla hasta el barrio judío, en una reivindicación de la soberanía de su país en la zona y la reafirmación de "Jerusalén unificada como capital eterna e indivisible del pueblo judío".
Jerusalén y las demandas de israelíes y palestinos sobre la ciudad son uno de los principales escollos para la paz en Oriente Medio.
La comunidad internacional considera la parte oriental territorio palestino ocupado, si bien deja en manos de las partes la delimitación final de fronteras definitivas en un acuerdo de paz que estas no han logrado cerrar tras más de dos décadas de interrumpidas negociaciones.Jerusalén, 24 mayo. EFE
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, afirmó hoy con motivo del Día de Jerusalén, que conmemora la toma de la Ciudad Vieja hace 50 años, que el Monte del Templo (Explanada de las Mezquitas) y el Muro de las Lamentaciones "permanecerán para siempre bajo soberanía israelí".
"Este logro histórico se mantendrá para siempre", declaró en la Knéset (Parlamento) , según el diario "Haaretz", durante un acto de conmemoración de lo que Israel considera la "reunificación" de la ciudad con la toma de su parte oriental, territorio ocupado desde 1967 que los palestinos reclaman como capital de su futuro estado.
Netanyahu volvió a poner sobre la mesa su petición del traslado de la embajada de Estados Unidos de Tel Aviv a Jerusalén, una promesa electoral que hizo el nuevo presidente de EEUU, Donald Trump, y que luego aparcó para concentrarse en tratar de impulsar un acercamiento entre israelíes y palestinos que pueda reactivar las negociaciones de paz, estancadas desde hace más de tres años.
"Jerusalén debe ser hogar de todas las embajadas, incluida la (norte)americana", incidió el primer ministro, una polémica decisión que supondría la aceptación por parte de EEUU de la ocupación israelí sobre la parte oriental.
El presidente israelí, Reuvén Rivlin, también se pronunció hoy con motivo de la festividad del Día de Jerusalén y aseguró que Israel "lo dio todo por Jerusalén porque sabía que sobre Jerusalén debía insistir", según una nota oficial.
"No ha habido ni hay otra realidad. Aquí, en estas piedras, late el corazón del pueblo judío. Jerusalén es el corazón del Estado de Israel, y el Kotel (el Muro de las Lamentaciones) es el corazón de Jerusalén", dijo Rivlin ante la explanada del Muro, el único vestigio del lugar más sagrado para los judíos, que estos denominan Monte del Templo y los musulmanes Noble Santuario o Explanada de Al Aqsa.
Miles de israelíes desfilarán hoy con banderas por la ciudad para entrar en el barrio musulmán de la ciudadela amurallada y atravesarla hasta el barrio judío, en una reivindicación de la soberanía de su país en la zona y la reafirmación de "Jerusalén unificada como capital eterna e indivisible del pueblo judío".
Jerusalén y las demandas de israelíes y palestinos sobre la ciudad son uno de los principales escollos para la paz en Oriente Medio.
La comunidad internacional considera la parte oriental territorio palestino ocupado, si bien deja en manos de las partes la delimitación final de fronteras definitivas en un acuerdo de paz que estas no han logrado cerrar tras más de dos décadas de interrumpidas negociaciones.Jerusalén, 24 mayo. EFE