Un inmenso abeto de 30 metros de alto, siete metros de diámetro y 14 mil kilos de peso, procedente de la región belga de Valonia, fue trasladado al Vaticano para ser colocado en la Plaza de San Pedro junto al tradicional Portal de Belén que se coloca todos los años durante la Navidad. El árbol tiene un centenar de años y sus ramas inferiores llegan a extenderse hasta los diez metros. El árbol es un regalo al Papa Benedicto XVI y será encendido el 18 de diciembre.