Un hombre en Estados Unidos fue condenado a cadena perpetua tras mandar a matar a su exesposa, pero por equivocación el primo al que contrató mató a la hermana de la mujer.
Según RT, la sentencia se dictó en el tribunal del condado de Snohomish en Washington, quien condenó a Kevin Lewis a no salir jamás de prisión y sin posibilidad de libertad condicional.
El delito se dio en el 2017 cuando Lewis contrató a su primo Jerradon Phelps para que acabe con la vida su expareja y madre de sus tes hijos.
El acusado aseguró haber pagado al entonces joven 2,400 dólares, según documentos judiciales.
El 20 de septiembre de ese año, Phelps consiguió una pistola y fue en búsqueda de su víctima. Sin embargo, este afirma que su primo Lewis jamás le comentó que su objetivo era su exesposa y solo le dio una dirección para cometer el crimen.
Phelps llegó hasta el lugar al lado de una amiga llamada Alexis Hale, llamó a la puerta y fue Alisha Canales-McGuire quien se encontraba cuidando a sus sobrinos en la casa de su hermana, ella estaba en Nueva York atendiendo unos negocios.
Es así que el sicario sin preguntar disparó a la mujer cinco veces y se fue de la zona. Sin embargo, las autoridades dieron con él y lo detuvieron.
Tras un año de investigación, el caso se quedó sin resolver hasta que los agentes descubrieron una pista: Phelps le contó a sus amigos que lo contrataron para matar a alguien en York Road.
Para julio de 2020, Phelps se declaró culpable y fue condenado a 31 años de cárcel, mientras que Hale, amiga y cómplice del delito, tendrá que pasar 15 años en prisión.