Una familia chilena que acompañó a uno de sus parientes en sus últimos minutos de vida, recibió el cadáver equivocado al momento de retirarlo del hospital público en el que estuvo internado y, después de velarlo y sepultarlo, ahora debe devolver el cuerpo, entre reclamaciones de negligencia.
Romualdo Adolfo Cubillos, de 89 años, el abuelo de la familia, había fallecido el 20 de agosto en el Hospital San José de una enfermedad pulmonar. Pero, tras su deceso, y al momento de retirar el cadáver, uno de los familiares aseguró que el empleado que los atendió no verificó la identidad e hizo caso omiso a sus reclamos.
Seis días después del error, las autoridades sanitarias contactaron con la familia para explicarles que habían recibido un muerto equivocado, pues se llevaron a un hombre de 62 años.