Esta pobre señora tomaba una rica siesta cuando dos jóvenes decidieron gastarle una broma. La agarraron en un profundo sueño y le pusieron un zapato haciéndole creer que se trataba de una llamada.
Cuando despierta, se demora un buen rato para darse cuenta que no está hablando con nadie y su reacción al saber que le estaban haciendo una broma, además de que se reían a carcajadas de ella es espectacular.
El video ya roza las 7 millones de reproducciones en Facebook y como van las cosas ese número subirá.
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