Los niños están muy cerca de la muerte, podríamos decir que la conocen bien, pues se la encuentran en los bichos muertos del jardín, en los cuentos, en las películas, en la ausencia de un familiar, en sus mascotas o en los videojuegos.
Hablar al respecto debería ser una prioridad, y lo mejor es hacerlo sin emociones intensas y de forma muy sincera, pues los niños podrían tomar literalmente lo que les decimos. Esto siempre será más sencillo que hacerlo cuando muere alguien querido. Adina Galante Psicóloga Clínica y Terapeuta niños y adolescentes en su texto publicado en NaranXadul comparte estas 5 recomendaciones:
Prepárate antes. No puedes explicar algo que tú en teoría todavía no comprendes por completo. Tu hijo te hará preguntas de todo tipo y querrá saber cosas que probablemente no has pensado, lo que nos lleva al siguiente punto.
Sinceridad. Las mentiras o metáforas no son siempre lo mejor, aunque se utilicen para hacerlo menos aterrador, podrías darle información innecesaria a tu hijo y provocar que le surjan más dudas y miedo en lugar de alivio. Si no sabes algo, es mejor decir “no lo sé”, “investiguemos juntos” o “hagamos nuestro propio concepto”, que decir algo que después pueda malinterpretarse. Un simple ejemplo es decir que: “las personas se van al cielo” al morir; esto podría hacerlos pensar que si se suben a un avión se van a morir, porque están en el cielo.
Da información dependiendo de la etapa en la que se encuentre tu hijo. Cuando son muy pequeños no necesitan tanta información, sin embargo, a medida que crecen, las explicaciones tendrán que ser más elaboradas y completas. Es importante saber su concepto para de ahí partir, o corregirlo si es algo que les está causando angustia.
Utiliza términos precisos y biológicos. Para los niños es más fácil entender que “la araña murió y ya no va a poder caminar”, que “la araña ahora descansará en un lugar mejor y por fin está en paz”. Ellos no comprenden estos conceptos, pero si eres claro y simple con las cosas, como decirle que “dejó de respirar”, “ya no podrá caminar”, “ver” o “escuchar”, será más sencillo de procesar.
Apóyate en las películas y las tradiciones sobre la muerte, como el “Día de Muertos”. Explícale que no es algo triste y que cuando las personas se van, este es un día para recordar todo lo bonito que dejaron.