La propagación delno solo tiene preocupado a los padres de familia, sino también a los hijos. De acuerdo a cifras del Ministerio de Educación, aproximadamente el 70% de escolares de quinto de secundaria no están seguros de cómo seguir su carrera una vez que culminan la educación escolar.

Aunque puede ser una decisión simple a ojos de los adultos, su participación como padre será fundamental para que sus hijos no se sientan más confundidos de lo que están.

“Los chicos se preguntan: ¿qué pasará? Aún nada es seguro en su futuro. Por eso requieren de apoyo y comprensión para tomar una buena decisión”, explica Elisa Ramos, psicóloga de Ediciones Corefo. Por eso, la especialista hace un llamado a los padres de familia a seguir estas recomendaciones y ayudar así de la mejor manera posible a sus hijos.

1. Búsqueda de objetivos: Cada joven debe descubrir qué cosas son importantes para su vida y su propio futuro. ¿Prefiere dedicarse a ayudar a la gente? ¿Busca una carrera corporativa que le permita ascender? Tal vez puede preferir opciones de empleo que pueda realizar exclusivamente desde casa. El joven necesita responder estas preguntas y saber cómo quiere vivir su propia vida. Solo si resuelve estas preguntas, podrá empezar a encaminarse correctamente.

2. Soporte afectivo: Este es un compromiso de por vida. Recuerda que un niño que crece en un ambiente de amor, de respeto y honestidad, podrá desarrollarse mejor a nivel emocional, educativo e incluso profesional. Necesita vivir en un ambiente que le permita ser él mismo, en el que se estimule su alegría por vivir y hacer las cosas que lo hacen feliz. Un niño así, con mucha probabilidad, soñará con su proyecto de vida, lo defenderá y luchará por él.

3. Promoción de la autonomía: Para construir un proyecto de vida el niño necesita aprender a ser autónomo y el adolescente debe disponer de libertad para elegir y asumir las consecuencias de sus elecciones. Para esto, primero debe vencer el miedo y adquirir coraje ante el éxito o el fracaso. Todo esto puede ser enseñado al niño desde casa, con lecciones simples como cumplir con sus deberes, ayudar en las labores domésticas, ser honesto con sus padres y aceptar las consecuencias de sus actos. Todas estas conductas, por muy pequeñas que puedan parecer, ayudarán a inculcar valores en los pequeños.

4. Una autoestima sana: Es esencial que el niño o joven sepa en qué nivel se encuentra su autoestima y cómo puede trabajar en ella. Si esta es muy baja, no podrá crear un proyecto de vida. Con una buena autoestima el niño se valorará a sí mismo, sabrá de todo lo que es capaz y podrá plantearse objetivos claros para seguir una carrera profesional.

5. Atreverse a soñar: A modo de ejercicio, un joven puede pensar en lo que hará en los próximos 6 meses, 5 años y 10 años para conseguir lo que se ha propuesto. El plan, por supuesto, puede cambiar y adaptarse según las circunstancias, pero le servirá como una guía en el camino que busca seguir para su futuro.