El fallecimiento de un hijo es el golpe más duro que puede padecer un padre o una madre por el amor y los años que ha compartido con el difunto. Ante una situación como esta, donde la pena y la tristeza predominan, existen algunas sugerencias para superar la crisis:
1. Es necesario es desfogue; es decir, si los padres necesitan llorar o gritar deben hacerlo para liberar los sentimientos que impiden su tranquilidad.
2. Aceptar el suceso es otro de los aspectos a tener en cuenta. Si bien es cierto que resulta complejo para gran parte de la gente, es indispensable asumir ese caso.
3. Las actividades recreativas también son de ayuda para superar la pérdida del familiar. El deporte o la música harán que los padres piensen en otros asuntos y con eso no sientan el dolor en todo momento.