En el marco de la lucha global contra el VIH, los avances médicos han transformado esta enfermedad en una condición crónica manejable, mejorando significativamente la calidad de vida de quienes la padecen. En el Perú, según el Centro Nacional de Epidemiología, Prevención y Control de Enfermedades (CDC Minsa), se estima que en 2023 unas 110,058 personas vivían con el virus. Aunque se ha progresado en la reducción de la mortalidad, persisten desafíos como el estigma social y el acceso equitativo a los tratamientos.
La atención integral de los pacientes con VIH debe incluir diagnóstico temprano, acceso universal a tratamientos antirretrovirales (TAR), cuidado de la salud mental y prevención de coinfecciones. “El manejo del VIH no solo implica tratar al virus, sino garantizar un enfoque multidimensional que contemple la salud física, emocional y social del paciente, siempre desde un trato humano y sin prejuicios”, destaca Roberto Avilés, médico internista y docente de la carrera de Medicina Humana de la Universidad Norbert Wiener.
En los últimos años, las terapias de acción prolongada y los tratamientos innovadores han cambiado las perspectivas de manejo del VIH. A continuación, en el marco del Día Mundial de Lucha contra el Sida (1 de diciembre), conoce algunos de los tratamientos más recientes que pueden mejorar significativamente la calidad de vida de los pacientes:
1. Inyecciones de larga duración: como parte de las terapias de acción prolongada, las inyecciones bimensuales (Cabotegravir y Rilpivirina) reducen la necesidad de tomar pastillas diarias, mejorando la adherencia y disminuyendo el estigma asociado al tratamiento.
2. Medicación semestral: el Lenacapavir es un medicamento innovador con un mecanismo de acción distinto, administrado cada seis meses, que ofrece nuevas opciones para los pacientes con resistencia a otros tratamientos.
3. Terapias duales: combinaciones como Dolutegravir con Lamivudina simplifican el tratamiento al reducir la cantidad de medicamentos necesarios, manteniendo la eficacia.
4. Tratamientos con anticuerpos monoclonales de acción prolongada: diseñados para neutralizar diversas cepas del VIH, se están probando como alternativa a los antirretrovirales. Este enfoque podría abrir la puerta a terapias menos frecuentes y más personalizadas.
5. Inmunoterapia y vacunas terapéuticas: estas vacunas, aún en etapa experimental, enseñan al sistema inmunológico a controlar el virus sin necesidad de medicación diaria y podrían representar una opción revolucionaria en el futuro.
6. Bictegravir: parte de regímenes antirretrovirales de una sola tableta diaria, combina eficacia y pocos efectos secundarios, facilitando el cumplimiento del tratamiento.
“El VIH es una condición crónica con la que se puede llevar una vida plena. Estos avances nos recuerdan la importancia de invertir en ciencia y en estrategias inclusivas para garantizar una mejor calidad de vida para todos”, remarca el docente de la Universidad Wiener.
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