La energía que destila los espíritus es real. Si alguna vez ha notado que una casa tiene un ambiente pesado, que al poco tiempo de estar en ella empieza a bostezar o tiene sueño, es porque tiene muchos espíritus y energías que necesitan salir y liberarse.
Estos espíritus pueden ingresar a la casa debido a las visitas que recibimos. Cada persona viene con una energía que van cargando de a pocos la casa. Para limpiar la casa de estas energías se puede utilizar estos 3 elementos:
1. Sal. Utilizado como método de protección contra espíritus durante siglos. Se debe coger un plato y poner en él varios puñados de sal. Luego se esparce esa sal por la habitación. Asimismo, se hace una línea de sal para cada puerta que tiene la casa y en las ventanas para generar una barrera que te proteja a sus integrantes.
2. Humos. Consiste en quemar hierbas secas para alejar las malas energías. Para esto es importante abrir todas las ventanas y formar columnas de humo de las hierbas quemadas. Se puede utilizar tomillo, pero si se tratan de espíritus más fuertes se puede usar polvo de ajo, canela o clavo.
3. Agua bendita. Se puede encontrar agua bendita en muchas iglesias, que las entregan de manera gratuita. Para esto se rocía el agua bendita haciendo una cruz en todas las puertas y ventanas de la casa.
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