La crianza implica para madres, padres y cuidadores, establecer una relación con un vínculo sano, afectuoso e incondicional con tu niña o niño. En ese sentido, una de las principales funciones de las y los cuidadores es educar, pero ¿qué sucede cuándo debemos debemos poner límites? La formación del niño, que inicia desde que nace, requiere de límites y normas, como por ejemplo las establecidas en las rutinas diarias: hora de dormir, comer, juego, de salir al parque, entre otras.

“La mejor manera de poner límites y normas a los niños es hacerlo desde muy pequeños. Cuando se le habla a la madres y padres de marcar límites, lo relacionan con severidad o ejercer actitudes violentas y no es así. En su lugar, se debe generar un ambiente lleno de diálogo, los buenos hábitos en esta etapa de vida del niño, les ayudará a diferenciar las conductas buenas y malas. Para ello, las madres, padres y cuidadores deben saber manejarlo, conversar y explicar, para corregir de forma adecuada”, señala Verónica Sánchez, psicóloga del Programa de Salud Mental SAME de la Fundación Baltazar y Nicolás.

Para esto, la especialista nos brinda 5 claves que ayudará a poner límites sin recurrir a los gritos y tener una crianza positiva:

  • No grites. Hacerlo solo pondrá más agresivo al niño o podrá desarrollar un temor hacia los padres. Es indispensable mantener la calma para poder generar un correcto espacio de diálogo, de forma pausada.
  • Escucha al niño. No hagas un monólogo, es importante que escuches y atiendas a tu hijo, para que analices el porqué de su comportamiento y le expliques qué es lo correcto.
  • Sé coherente. Como madre o padre no solo se debe corregir al niño, también, tienes que ser un ejemplo y reflejar las buenas conductas.
  • Propón soluciones. Además de conversar y explicar al niño, es bueno brindar posibles soluciones hacia un problema.
  • Recompénsalo. No solo es corregir las malas conductas de los hijos, sino también se debe estar atento cuando realicen buenas acciones, elogiarlas y por qué no recompensarlas cuando lo amerite.

Estos son algunos consejos que te ayudarán frente a las conductas de tu hijo, poder corregirlo y explicarle de manera adecuada por qué está bien o mal lo que hace. Recuerda que la labor como madres y padres es lograr un equilibrio entre mantenerse firmes y dar autonomía para conseguir un desarrollo integral de nuestros niños. Si deseas conocer más sobre este tema y obtener consejos que te ayuden a fortalecer el vínculo padre-hijo. Puedes visitar

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