El príncipe Harry y su esposa Meghan Markle fueron captados repartiendo comida a distintos domicilios en Los Ángeles. La iniciativa surgió a raíz de la pandemia mundial del coronavirus y que viene afectando con mucha más índole a personas que padecen enfermedades crónicas de muy bajos recursos.
La pareja se mostró en todo momento muy protegida por mascarillas, gorras y guantes, para así evitar cualquier tipo de riesgo de contagio del COVID-19.
Recordemos que la expareja real venía estando desaparecida luego de que anunciaran la renuncia a sus títulos nobiliarios como parte de su acuerdo de separación de la familia real británica.
El acuerdo alcanzado para sellar la separación de la familia real despojó a Harry y Meghan de fondos públicos, y les exigió un reembolso millonario, que fue utilizado para la renovación del complejo donde viven, cerca del castillo de Windsor.
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