Más terrible que nunca

Su bronca con Beto Ortiz, su nueva paternidad, la pelea con su ex y sus hijas. Vida de escritor es una telenovela.
No hay nada que hacer que Jaime Bayly, el año que se fue, se destacó por méritos propios como el personaje televisivo más polémico. Inició el año 2010 con un sonado enfrentamiento con Beto Ortiz cuando ambos laboraban en Frecuencia Latina. Ortiz difundió fragmentos de la primera novela de Silvia Núñez del Arco, la chica de Bayly, en el programa que conducía con Aldo Miyashiro, 'Enemigos públicos', generando repudio en el 'Tío terrible'. La cabeza de Beto rodó y fue despedido por el entonces gerente general, el chileno Javier Urrutia.
Beto y Aldo y toda su gente se fueron a Panamericana Televisión, donde el periodista cegado por su sed de venganza volvió a arremeter contra Bayly criticándolo por haber comprado dos departamentos de lujo para sus hijas. El entonces 'francotirador' respondió con todo y dijo que su dinero no es nada comparado con los millones que maneja el actual dueño de Panamericana, Ernesto Schutz Landázuri, prófugo de la justicia peruana, quien tiene un edificio en una zona exclusiva de Suiza, entre otros negocios. Ortiz fue despedido de Panamericana por 'presiones' de Bayly. La misma suerte corrió después Bayly, a quien Frecuencia Latina le rescindió su contrato luego de haber arremetido contra Lourdes Flores durante casi toda la campaña electoral municipal, provocando su derrota.
Jaime Bayly volvió a acaparar titulares porque él mismo contó que su chica Silvia Núñez del Arco estaba embarazada de él. Su ex esposa, Sandra Masías, lo tildó de cornudo porque está convencida de que el bebé que espera la jovencita no es de Jaime, quien se sintió comparado con 'Melcochita'. Mientras que Sandra comparó a Silvia Núñez con una 'perra chusca'.
El ex 'francotirador' echó a su ex del departamento que él compró para que viva ella y sus dos hijas Camila y Paola, quienes también rechazaron a su joven nueva pareja y no aceptaron la llegada de su nueva hermanita. Tanto así que Camila fue con su patota de amigos a la casa de Silvia lanzarle huevos. Jaime pidió a sus hijas que también dejen su departamento y ahora ellas no lo quieren ver más. Al parecer la telenovela de su vida continuará...