Estudiantes de San Marcos vivieron 13 horas de terror

U n viaje de estudios se transformó en una verdadera pesadilla para 47 alumnos de la escuela de Geografía de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM), luego que seis de ellos se perdieran por casi 13 horas en las ruinas de Rúpac, en la sierra de la provincia limeña de Huaral.

Afortunadamente, todos fueron encontrados sanos y salvos. 'Subimos tanto en la zona de las ruinas que ya no supimos cómo regresar por el camino, pues la densa neblina que cubrió el lugar no nos dejaba ver con claridad y nos equivocamos de ruta', dijo aún en shock la estudiante Shirlyn Rojas Neri (20), una de las que se extravió.

Los universitarios llegaron al pueblo de Pampas, en el distrito de Atavillos Bajos, el último sábado a las seis de la mañana, y encabezados por un profesor y un guía iniciaron su ascenso de tres horas hasta las ruinas de Rúpac, para realizar un trabajo. Tras el recorrido, iniciaron el camino de retorno a Pampas, excepto seis de ellos: Kevin Romaní Luis (20), Shirlyn Rojas Neri (20), Rebeca Mamani Mori (25), Mary Osco Uruchi (22), María Cerna Manya (19) y Elvis Rengifo Martínez (19), quienes se habían separado del grupo.

' Sentimos mucho miedo y el frío era terrible. Como no podíamos bajar por la neblina y la gran cantidad de barro que se formó por la lluvia, decidimos refugiarnos en una cueva. Temíamos no ser encontrados nunca, pensamos en lo peor. Pero nunca perdimos la fe', recalcó Rojas Neri. Agregó que debieron hacer miles de malabares para cuidarse del frío, pues estaban con la ropa empapada y que solo algunos lograron dormir un poco.

Tras percatarse de la ausencia de los seis estudiantes, sus compañeros dieron aviso a la policía y fue así como un equipo de efectivos policiales del distrito de San Miguel de Acos logró ubicar a los universitarios, algunos de los cuales presentaban malestares por la altura.

Los jóvenes fueron conducidos a la zona de Pampas donde se reencontraron con sus compañeros, luego a Huaral para ser examinados por los médicos y finalmente llegaron a Lima. 'Fue una experiencia muy desagradable, pero todo sucede por algo', resaltó la joven universitaria.