“Maldito, me quitaste a toda mi familia. Estoy sola en este mundo. Lo perdí todo por tu culpa”, exclamó Ofelia Jaramillo Torres, quien vio cómo el chofer de la agrupación musical Corazón Serrano embestía al auto donde viajaban siete integrantes de su familia y provocaba la muerte de casi todos los pasajeros.
La mañana del domingo, Ofelia, sus tres hijos, dos sobrinos, su padrastro, esposo y un hermano decidieron ir a disfrutar de la playa Acapulco de Chancayllo, ubicado en el kilómetro 91 de la Panamericana Norte, en Chancay, donde pasaron la última tarde de verano juntos y lo disfrutaron, irónicamente, como si fuera el último día de sus vidas.
Ya en la tarde, Ofelia quiso retornar a su casa, ubicada a solo cinco minutos, pero como ninguno de sus familiares le quiso acompañar, decidió ir caminado.
Cuando faltaban unos cuatro metros para llegar a la carretera, se topó con el auto de placa C3U-248, que era conducido por su hermano Juan Carlos Jaramillo Torres (26). En el mismo vehículo viajaban su esposo Hernán Arteaga Meza (54); sus hijos Jairo (14), Gabriela (12) y Jostín Jack A. J. (10); su padrastro Juan Millan Toribio (48) y sus sobrinos Alain Javier (10) y Joseph Ángel Z. J. (7). Todos iban en el carro con dirección a la casa de la abuela.
“Ellos me vieron caminado y en broma me decían que vaya caminando, porque estaba subida de peso”, agregó sollozando Ofelia Jaramillo.
Al levantar la cabeza, luego de que el auto la dejara atrás, vio que el bus de la orquesta Corazón Serrano arrastraba unos 30 metros al auto donde viajaba toda su familia e hizo que impactara contra un poste de alumbrado público. Como producto del brutal choque, todos los ocupantes salieron “volando” hacia la pista.
“Fue mi peor pesadilla, no lo podía creer. Pensé que todo era un sueño. Cuando vi a mis hijitos tirados en la pista llorando porque veían a su padre desangrarse, asumí que todo era real”, prosiguió narrando la devastada mujer.
Contó que en ese momento no sabía qué hacer porque todos clamaban ayuda, todos seguían con vida.
“Esos señores de la agrupación musical ni siquiera se acercaron a ayudarme. Mis hijos lloraban desesperadamente al ver desangrarse a su padre y ni aún así esos tipos se conmovieron”, agregó la testigo presencial del trágico accidente.
Según narraron los pobladores que se acercaron al lugar tras la colisión, Edwin Yhoir Guevara Mendoza (32), chofer de la agrupación musical, intentó darse a la fuga aprovechando que Ofelia Jaramillo luchaba por salvar la vida de sus seres queridos.
“Tuvimos que hacer parar el bus porque ese sujeto seguía manejando. Intentó escapar abandonando a la familia”, reveló un testigo.
Sin fuerzas para luchar, Ofelia Jaramillo vio agonizar a su hija Gabriela en sus brazos. “‘Descansa en paz, mi amor, allá arriba nos volveremos a ver’, le dije a mi hijita y ella de un suspiro se fue al cielo”, contó.
Unos metros más adelante yacía el cuerpo sin vida de su esposo, el profesor Hernán Arteaga, y al lado el de su padrastro; ambos ya no respiraban, habían dejado de existir. En tanto, su hermano Juan Carlos había muerto de forma instantánea al ser aplastado en el auto.
Los otros menores heridos fueron trasladados al hospital de Chancay, pero solo Joseph Ángel ha sobrevivido. Aunque su estado es delicado, Ofelia ruega por su salud.
La Policía detuvo a Guevara Mendoza, quien conducía el bus de placa TQG-968, y lo llevó a la comisaría de la zona.
FAMILIA VINO DE VACACIONES . El 31 de diciembre, Ofelia Jaramillo Torres, su esposo y sus tres hijos llegaron a Lima procedente de Cerro de Pasco a pasar dos meses de vacaciones, como lo hacían todos los años. “Siempre veníamos acá para que mis hijos disfruten de sus vacaciones junto a sus primos, pero ese desgraciado arruinó mi vida”, finalizó Jaramillo.