Un vendedor de emoliente, identificado como Santos Cholán, arrojó agua hirviendo a los trabajadores de Fiscalización de la Municipalidad de Lurigancho-Chosica.

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Durante la intervención, el sujeto lanzó agua hirviendo a los funcionarios municipales en un intento por evitar que se llevaran su carrito de emolientes, aparentemente frustrado por los repetidos intentos de confiscar su herramienta de trabajo.

Inmediatamente, las autoridades policiales trasladaron al hombre a una comisaría local para que rinda cuentas por sus acciones, mientras la investigación sobre este incidente continúa en curso.

Uno de los agraviados, cuyo nombre es Diego Armando López Paulet, sufrió quemaduras de primer y segundo grado como consecuencia del ataque.

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