Keiko Fujimori cumplirá los 36 meses de prisión preventiva que le dictó el juez Richard Concepción Carhuancho por el presunto delito de lavado de activos.
Tras esto, Mark Vito Vilanella, esposo de la lideresa de Fuerza Popular, narró lo que le pidió Keiko Fujimori luego de la decisión del juez: "La primera cosa que me pidió es ir a la casa y que le diera a nuestras hijas dos abrazos", sostuvo en el programa Beto a Saber.
Vito también expresó su preocupación por el bienestar de sus hijas: "Su principal preocupación después de la sentencia es sus hijas, me preocupa el daño psicológico que pueden pasar ellas".
MARK VITO Y EL ENCUENTRO CON SUS HIJAS
Luego de la decisión del juez, Mark Vito se dirigió hasta su vivienda para poder hablar con sus dos hijas, pero este habría sido un momento difícil: "Fui a la casa hoy, quería explicarles antes que otros, pero confieso que no supe qué decir, no sé, no hay nadie en el mundo que prepare a una persona para esta situación", narró para el mencionado programa.Según ha dado a conocer el esposo de Keiko Fujimori, aún no han decidido si las niñas irán a visitar a su madre a prisión: "Necesitamos ver una forma de que nuestras hijas puedan regresar a los brazos de su mamá", agregó.
"NO SOY NADIE"
Durante la entrevista, Mark Vito negó estar con Keiko Fujimori porque le guste la política, sino por amor. "Yo no soy nadie para criticarla, yo no soy nadie. ¿Quién soy yo? Soy un hombre que se enamoró"."Hay dos requisitos (me dijo Keiko para que nos casemos): que me ames y ames a mi país. Yo estoy aquí porque amo a Keiko y amo el Perú. Por lo político nada que ver".
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