Pedro Castillo, quien acaba de ser vacado del puesto de presidente de la República, se encuentra en la sede de la Prefectura de Lima, ubicada en la avenida España.
Su traslado se dio horas después de que anunciara un golpe de estado y la instauración de un estado de excepción en todo el país, pero que no tuvo ningún respaldo de las Fuerzas Armadas, dado que se trató de una acción ilegal.
El golpe de Estado
Horas antes de esta decisión, el presidente Pedro Castillo dio un golpe de Estado pronunciando las siguientes palabras:
“En atención al reclamo ciudadano a lo largo y ancho del país tomamos la decisión de establecer un gobierno de excepción orientado a establecer el Estado de derecho y democracia, a cuyo efecto se dictan las medidas: disolver temporalmente el Congreso de la República e instaurar un gobierno de emergencia excepcional”, fueron las palabras del presidente en un mensaje a la Nación.
“Convocar en el más breve plazo a elecciones para un nuevo Congreso con facultades constituyentes para elaborar una nueva Constitución en un plazo no mayor de nueve meses. A partir de la fecha y hasta que se instaure el nuevo Congreso se gobernará mediante decretos ley”, exclamó Castillo al romper el orden constitucional.
“La PNP con el auxilio de las FF.AA. dedicarán todos sus esfuerzos al combate efectivo de la delincuencia, la corrupción y el narcotráfico. Cuyo efecto se les dotará de recursos necesarios”, dijo el presidente.