La señora Maritza y el señor Julio, los padres del bebé que denunciaron no haber recibido el cuerpecito del mismo dentro de un ataúd, sino un táper, confirmaron que ya están velándolo en su hogar.
Ambos padres agradecieron a la prensa por la ayuda prestada para que el hecho sea conocido y el padre denunció negligencia en el Hospital de San Juan de Lurigancho, asegurando que se demoraron para atender a su esposa y al bebé.
La madre de la criatura informó que le intervinieron a las 6:04 de la tarde del último viernes luego de que al mediodía le indicaran que no había latidos. Sin embargo, ella asegura haber tenido dolores hasta el último momento.
De acuerdo al comunicado del Hospital, el bebé habría fallecido producto del coronavirus o Covid-19 y falleció antes de nacer, es decir en el vientre de la madre.
El padre, muy dolido, contó que le darán una digna despedida a su bebé y no lo cremarán como había querido el hospital.