En una fecha tan trascendental como lo es el 8 de marzo, Día Internacional de la mujer, resulta inoportuno o inconveniente que los hombres “celebren” a sus parejas enviándole flores o entregando cualquier regalo.
Por el contrario, este día solo se busca impulsar la lucha de las mujeres por la igualdad de derechos, de oportunidades y recordar para dejar atrás la violencia que muchas sufren por el espectro machista.
“Los comentarios como ‘felicidades a la flor más bella’ o ‘felicidades a las mujeres que tanto nos cuidan’, es contrario a la lucha por los derechos de las mujeres. Esto no significa que las mujeres no seamos bellas, o no nos cuidemos, o no queramos ser valoradas, pero nos devuelve a este rol donde lo único que se nos permite dentro del patriarcado es ser adornos o ser cuidadoras”, dijo a El Financiero.
Desde sus redes sociales, el Instituto para el Desarrollo de Masculinidades Anti Hegemónicas (IDMAH), detalla de una manera sencilla por qué el 8 de marzo no es un día para felicitaciones, por el contrario, es una fecha para conmemorar y generar conciencia.
“Todavía hoy, en pleno contexto de reivindicación de los derechos de las mujeres, se llenan las redes de mensajes para “celebrar” a las mujeres, cuando en realidad, la fecha es más una oportunidad para reflexionar sobre la reivindicación que ellas hacen (...) Ante fechas como el 8M, como hombres, nos corresponde menos felicitar, y más cuestionar nuestros sesgos, nuestros patrones, y poner toda la autocrítica en todo aquello que podemos transformar”, indican en su cuenta de Instagram.
Así aportas con esta lucha de las mujeres
“Si tú eres hombre y estás diciendo voy a marchar porque apoyo la causa feminista, me voy a poner una camisa rosa y un pañuelo verde, te tengo una noticia: no nos ayuda nada. Tu lucha empieza contigo (...) tu espacio en la marcha no marca ninguna diferencia”, explica la periodista mexicana Carol Solís.
Según Solís, esto es lo que hombre debe tener en cuenta para el Día Internacional de la Mujer:
- Introspección: Reconoce tu machismo, tu misoginia, cosas que tienes interiorizadas y a lo mejor no las notas porque las normalizaste.
- Deconstrúyete: Comienza a romper esas estructuras machistas y arcaicas que te han impuesto.
- Corta la cadena: rompe el pacto patriarcal, es decir, no solapes a tus amigos, diles cuando estén incurriendo en conductas incorrectas, machistas o misóginas.
- Genera espacios: Si tienes una empresa o tienes un cargo ayuda a que el suelo esté parejo y colabora para que las mujeres tengan las mismas oportunidades.
- Demuestra tu apoyo: Apoya a las mujeres que participan en la lucha, quédate en casa cuidando a los hijos, cubre su turno en el trabajo y ayuda a que vayan a la marcha.