Las ciudades en el Perú han experimentado un gran proceso de expansión urbana durante las dos últimas décadas, lo que representa un incremento de cerca del 50% de su suelo. Sin embargo, este crecimiento ha sido fundamentalmente informal.
El 93% de este nuevo suelo urbano se incorporado a la ciudad al margen de la planificación y, además, no cuentan con acceso a servicios básicos, espacios públicos e infraestructura para todos sus ciudadanos, según explica Rudolf Giese, decano de la Facultad de Arquitectura de la UCAL. Es decir, solo el 7% de las nuevas áreas edificadas en los últimos veinte años han sido producto de pensar en una ciudad planificada.
Frente a este desafío, el experto menciona que se hace impostergable abrir el debate sobre el tipo de ciudades en las que queremos vivir en el futuro, considerando variables como el medio ambiente, la movilidad, calidad de vida, acceso a servicios públicos y la seguridad. En ese sentido, resalta que el planeamiento urbano juega un rol fundamental para dar solución a las necesidades de los ciudadanos, construyendo ciudades justas y equitativas, orientando su crecimiento de manera sostenible, en armonía con la naturaleza y acorde con los recursos disponibles.
“Planificar es dar certeza de cara al futuro. Esto permitirá gestionar los recursos en beneficio de todos sus ciudadanos, procurando el bien común y la construcción de ciudadanía”, aseguró Giese. “Cuando hablamos de repensar nuestras ciudades, debemos tener en cuenta algo tan básico como que hay un alto porcentaje de la población que no cuenta siquiera con recursos básicos como luz, agua y desagüe. Los espacios del futuro tienen que ser fundamentalmente solidarios y participativos, y no solo ser pensados en función de lo estético y lo eficiente”, detalló.
En ese contexto y, en el marco del Día del Arquitecto Peruano, el especialista comparte ocho claves fundamentales para transformar el planeamiento de nuestras ciudades de cara al futuro:
- Las ciudades deben ser planificadas y resueltas desde el diseño urbano, el mismo que debe involucrar todas las variables que impactan en la vida de los ciudadanos.
- Los ciudadanos son los actores más importantes en el planeamiento de las ciudades. La planificación sólo es posible cuando la comunidad se involucra en la búsqueda de solución de sus propios problemas.
- El planeamiento de las ciudades debe contemplar la mezcla entre los valores, usos y costumbres locales, pero desde una mirada global.
- El planeamiento debe considerar que, para ser exitoso, debe estar dispuesto a resolver conflictos, teniendo en cuenta que en una ciudad existen múltiples puntos de vista. El debate e intercambio de ideas es fundamental para lograr consensos y nuevas ideas comunes.
- Debemos asumir la complejidad de las ciudades y comprender que el cambio es la única constante dentro de las mismas.
- El planeamiento debe contemplar la flexibilidad en el diseño urbano. Lo rígido limita las oportunidades de uso y la ciudad necesita ser un escenario para múltiples interpretaciones.
- La transdisciplinariedad debe ser una herramienta fundamental en el planeamiento de nuestras ciudades, esto permitirá potenciar las capacidades de cada miembro de la comunidad y definir los roles con mayor claridad.
- El planeamiento debe ser transparente y colaborativo, realizado con la participación de toda la ciudadanía.
