En la pandemia, la interacción de las parejas cambió pues, al principio, comenzaron a pasar todo el tiempo juntos y, a esta nueva forma de convivencia, se sumaron factores estresantes propios de la situación que vivíamos.
Aunque dichos cambios propiciaron tensiones y conflictos, la separación no fue una tendencia en los matrimonios. Al contrario, según el psiquiatra y psicoterapeuta del Instituto Nacional de Salud Mental (INSM), Víctor del Carpio Reymer, las parejas han estado mucho más cercanas debido al miedo y cambio permanentes.
“La gran mayoría ha compenetrado a pesar de las distintas dificultades, pues la familia ha sido la base para afrontar los problemas (...) (La pandemia) ha fortalecido las relaciones y el núcleo familiar. Si bien han habido circunstancias de conflicto y divorcio, lo que se ha visto es una tendencia a la unión familiar como medida ante tanto estrés”, declaró a OJO.
La infidelidad bajó de 18,3 % al 1,1 % en Lima como causa de tensión familiar durante la pandemia
Del Carpio Reymer sostuvo que durante la emergencia sanitaria ha habido un incremento “circunstancial” de personas que prefieren relaciones de largo plazo a aventuras o relaciones pasajeras; sin embargo, dicha tendencia se está revirtiendo poco a poco conforme las medidas restrictivas han ido cambiando.
“Está todavía la tendencia a querer tener relaciones un poco más formales, pero ya no con la misma intensidad que un año previo debido a la reactivación de varias actividades”, manifestó.
Agregó que la opción de no tener relaciones casuales o fuera del matrimonio, se evidenció en un estudio que realizó el INSM y determinó que la tasa de infidelidad en parejas de Lima Metropolitana disminuyó sustancialmente en este periodo.
Especialista explica que dificultades fortalece relaciones. Los factores de mayor tensión entre parejas han sido relacionados a la economía, salud, restricciones y el carácter.