Hola, soy Magaly Moro y leo todos los días tu caso del corazón para darte un consejo. Siempre protejo la identidad de las personas que me escriben porque esta historia podría ser la de cualquiera.

El amor nos impulsa a ser mejores personas, pero también nos puede cegar y poner contra la espada y la pared. En este espacio recibirás un consejo, el consejo de una amiga anónima. Ojo, esto no es una terapia. En muchos casos sí es importante recurrir a una, ya sea solo o en pareja.

Hoy te cuento la historia de Liliana, de 31 años, quien vive en el distrito de Pueblo Libre.

Liliana (31, Carabayllo). Doctora Moro, me encuentro indignadísima con Rubén, mi novio. Apenas tenemos 6 meses juntos y siento que ya no quiero seguir a su lado. Pero, por otro lado, temo terminar nuestra relación por una acción que podría ser vista como una tontería, por eso recurro a usted para que me proporcione un sabio consejo.

Resulta que mi pareja y yo quedamos planeamos realizar un intercambio de regalo por Navidad; como queríamos que todo fuera sorpresa, decidimos no dar pista de lo que deseábamos, pero lo que sí acordamos fue un monto aproximado del obsequio. Como mi chico es amante de los adornos vintage, se me ocurrió regalarle una máquina de escribir. No sabe cuánto me esmeré en conseguirla y, cuando al fin la encontré, no me importó pagar mucho más del monto acordado con tal de ver la alegría de mi pareja al recibir ese detalle.

Cuando el día tan ansiado llegó ocurrió algo que jamás me hubiera imaginado. Todo empezó cuando vi a mi chico con una caja pequeña en las manos, me defraudé, aunque luego pensé que podría ser un hermoso reloj, ya que uso mucho este accesorio. No obstante, grande fue mi decepción cuando descubrí que me había regalado un pack de 3 desodorantes medicados.

No pude evitar que mis ojos se llenaran de lágrimas. Él me abrazó y me dijo que no me ofendiera, sino que sentía que el desodorante que yo usaba no me favorecía y que su intención era que yo no pase vergüenza por desprender malos olores. En pocas palabras, me dijo apestosa. Yo solo atiné a irme y, desde entonces, no le respondo ni una solo llamada. ¿Qué hago, señora Moro? No es la primera vez que me hace sentir desvalorada. ¿Cree que estoy exagerando?

CONSEJO

Querida Cristina, tranquila, cualquier persona se hubiera sentido mal con un regalo como ese, sobre todo si tú te esmeraste tanto en entregarle un obsequio tan lindo. Por otro lado, si no es la primera vez que tu novio te incomoda o te hace sentir “desvalorada”, entonces no debes seguir a su lado. Cuando es amor real, uno se siente feliz y tranquila. Piensa bien las cosas. Suerte.