Familia se salvade milagro

Alex Tapia y su esposa Rosa María estaban durmiendo cuando el suelo empezó a temblar y corrieron a buscar a Domenika y Alex, sus hijos, y los abrazaron mientras sentían que el edificio en que vivían se venía abajo. El terremoto en Chile los tiró al suelo, pero se mantuvieron unidos.
'Es indes-criptible. Sólo abrazamos a nuestros hijos y caímos. Dije: Dios, ayúdanos', cuenta Alex, un marino ecuatoriano que cumple funciones en Chile, y alquilaba un departamento en el sexto piso del edificio que se derrumbó.
Tras el impacto, con ayuda lograron salir debajo de los bloques de concreto.