Entre las principales causas que generan la mala postura, el mal alineamiento de la columna, los dolores de espalda, las contracturas, la rigidez, entre otros males que aquejan a los adultos, se debe al uso de un calzado inadecuado en las primeras etapas de la vida. Por esta razón, el cuidado de los pies, desde el nacimiento de un niño, es de suma importancia para prevenir molestas enfermedades a largo plazo.
En ese sentido, Colloky, la marca especializada en moda infantil, ha creado y desarrollado el concepto de calzado para cada etapa del andar del niño, con las características necesarias que contribuyen con el correcto desarrollo de su motricidad: desde que son bebés recién nacidos, aprenden a gatear, inician sus primeros pasos y cuando ya afianzaron su marcha.
De acuerdo al médico pediatra, José Recoba, el calzado de los niños debe permitir su desarrollo físico y motor, además de ajustarse a las necesidades propias de cada etapa de crecimiento. “Toda la vida se tuvo la falsa idea de que el zapato tiene que ser formador del pie, y se ponía una serie de implementos muy rígidos que impedían el desarrollo de la marcha óptima y la sensorialidad”, señaló el especialista. “Por el contrario, los zapatos deberían ser ligeros, blandos y flexibles, de tal manera que, cuando se lo pruebas, el pie del niño no queda apretado”, puntualizó.
Para bebés recién nacidos, los zapatos aún no tienen un uso utilitario; es así que, en la “Etapa Bebé”, Colloky ofrece calzados con forros suaves y espacio interior para su correcta estimulación con los materiales adecuados que permiten mantener la temperatura del pie.
Para la “Etapa de Gateador”, Colloky ha desarrollado calzados con puntas y talones reforzados para proteger y estimular el avance. Asimismo, el calzado es flexible para acompañar el movimiento natural del pie, con plantillas porosas que permiten una mejor ventilación.
Cuando empiezan a adquirir marcha, los niños necesitan calzados que les brinden estabilidad; por ello, la “Etapa Primeros Pasos” maneja los talones más elevados para apoyar el equilibrio, evitando la torsión del tobillo; además, un arco medio (prevent arch out) que apoya la distribución del peso de manera homogénea.
Al aumentar la capacidad física del niño, se necesita un calzado que los proteja de posibles lesiones. En la “Etapa Caminante”, el niño ya afianzó sus movimientos, por lo que es necesario apoyarlos con calzados que tengan los refuerzos interiores adecuados, plantillas respirables y un diseño que permita mantener su estabilidad vertical.
“El calzado adecuado es una forma de prevención: Si vamos a caminar 150 mil kilómetros a lo largo de la vida, comienza con los zapatos correctos que te ayuden a tener una vejez sana,” aseveró el doctor José Recoba.
MIRA ESTO:
Atento: 4 cosas que todo trabajar debe saber antes de jubilarse [VIDEO]
¿Sigues soltera? 5 hábitos que te mantienen en esta situación