El atún es una rica alternativa para el que no tiene tiempo para cocinar cosas más elaboradas.
Abres una lata, algo de limón, sal, cebollita, galletas y chau hambre. Otros lo prefieren a la vizcaína, tipo guiso, y también es muy sabroso.
En realidad, hay muchas formas de alimentarse con una latita de atún, ya sea en conserva, trozos o filetes.
Por todo esto, resulta casi un crimen que nos estén vendiendo en los mercados conservas de caballa contaminadas con gusanos, importadas de China.
Están jugando con la salud de la población y las autoridades del ramo tienen que golpear la mesa.
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