La semana pasada sacábamos pecho porque la selección peruana de fútbol apareció en el puesto 18 del ranking FIFA, entre las 20 mejores del mundo, una ubicación histórica, jamás vista en nuestro alicaído balompié.
Para muchos hinchas esta alegría se fue al suelo tras el vergonzoso espectáculo que se vio en el estadio Monumental de Universitario cuando delincuentes disfrazados de hinchas ingresaron armados con todo para agredir a los futbolistas, entre ellos Vargas, por los malos resultados.
Estamos volviendo al tiempo de las cavernas y solo nos falta cambiar la pelota por una piedra.
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