“Para bajar de peso no se puede comer arroz”. FALSO. 100g de arroz cocido aporta cerca de 115 calorías, comparables a lo que aporta 1 fruta mediana como la pera.

“Si tiras el agua de cocción o lo remojas antes de la cocción, engordará menos”. FALSO. En este líquido se depositan vitaminas y minerales del arroz y las moléculas más pequeñas de carbohidrato, el grano sigue conservando íntegro el almidón.

“El arroz integral no engorda por eso es para dietas”. FALSO. Es un arroz más nutritivo y con un índice glicémico más bajo (velocidad en que el carbohidrato llega a la sangre luego de la digestión). Esta cualidad, así como el aporte de fibra, mantiene más estables los niveles de glucosa en sangre, pero sigue manteniendo el aporte de calorías.

“No se puede mezclar el arroz con otro carbohidrato porque cae mal y engorda más”. FALSO. Nuestro sistema digestivo digiere ambos carbohidratos hasta obtener glucosa para ser absorbido, la mezcla no afecta este proceso en absoluto. Engordará más en la medida que la cantidad de ambos alimentos sea mayor a sus necesidades.

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