Dos películas sorprendentes
Dos películas sorprendentes

Al concluir oficialmente el 17 Festival de Cine de Lima, hay que destacar el estreno de otras dos películas importantes. Se trata del documental Stories we tell (Las historias que contamos), de la actriz y realizadora canadiense Sarah Polley; y el drama urbano The lunchbox, del cineasta indio Ritesh Batra.
Sarah Polley es una consagrada estrella del cinema canadiense y como directora tiene en su haber tres cortos y tres largometrajes. Entre estos últimos el más conocido es el sólido drama Away from her (2006), que protagonizó una espléndida Julie Christie en el papel de una madura mujer aquejada de Alzheimer.
Stories we tell, incluida en una muestra especial ambulante, tiene la estructura narrativa propia del documental, pero Polley se atreve a darle un cierto aire de ficción. En ella pone al descubierto un secreto familiar muy íntimo, en el que la figura de su madre fallecida se convierte en el centro de atención. Los materiales de archivo (películas caseras) se combinan con entrevistas a diversos familiares cercanos y amigos de sus padres, recurriendo incluso recreaciones con actores para simular 'home movies' y darle un aura de misterio a la narración.
La cámara registra testimonios de recuerdos pasados que se contradicen o no comparten los mismos puntos de vista, resaltando la presencia de dos figuras paternales que sirven de notable contrapunto. El asunto principal -sobre el origen de la cineasta- puede ser en cierto sentido muy dramático, pero tras su descubrimiento Polley no se deja arrastrar por la melancolía e impone su buen humor para liberar tensiones.
The lunchbox, exhibida en la sección Semana de la Crítica de Cannes, echa una penetrante mirada a la soledad de su protagonista, el empleado público viudo Saajan Fernández (magníficamente interpretado por Irrfan Khan), quien ha tomado la decisión de hacer efectiva su jubilación anticipada. Sin haber podido formar una familia, el hombre tendrá más cerca que nunca la posibilidad de cambiar su destino.
Al otro lado de la ciudad vive una bella mujer llamada Ila (Nimrat Kaur), cuyo esposo ya no le presta atención y le hace suponer que tiene una amante. Ellaestá dedicada al cuidado de su pequeña hija y el deseo de reconquistar el cariño de su pareja la motivará a enviarle una lonchera con deliciosos potajes a su centro de trabajo. Sin embargo, por equivocación la lonchera llegará a las manos del señor Fernández y a partir de ese momento la comunicación entre ambos -mediante breves mensajes en pequeños trozos de papel- hará surgir una ilusión en los dos.
En su impecable ópera prima, Ritesh Batra ilustra con notable economía expresiva las rutinarias existencias paralelas de sus protagonistas, cuyo único hilo comunicante les abre una esperanza de cambio aunque no sea juntos. Una aventura epistolar en la que son relevantes las pausas y silencios que el drama va construyendo en la ruta.
La habilidad de Batra para la narración limpia, minuciosa en su descripción de ambientes y situaciones, deja también espacio para el humor. Por un lado gracias a la tía vecina de Ila, de quien solamente escuchamos su aparatosa voz, y por otro con la presencia del joven aprendiz (Nawazuddin Siddiqui) que el Sr. Fernández debe entrenar como su reemplazo en la oficina. Tanto los consejos que de esa tía 'invisible' a su sobrina como las conversaciones entre Fernández y el aprendiz contribuyen a darle al relato una extraordinaria vitalidad.