La mastitis una afección inflamatoria del pecho que puede estar o no acompañada de infección. Por lo general, se asocia con la lactancia materna, pero puede ocurrir por muchas razones.
-Mal drenaje de la leche debido a que el bebé se adhiere al seno de manera incorrecta.
-Alimentación interrumpida donde el bebé no tiene tiempo para vaciar completamente el seno.
-Ropa restrictiva que ejerce presión sobre el tejido mamario.
-Infección. Los pezones agrietados o sangrantes pueden ser un punto de lesión para que las bacterias viajen al seno y causen una infección.
- Inflamación sistémica debido a una alergia o la inflamación localizada debido a una lesión puede desempeñar un papel en el desarrollo de la mastitis.
Síntomas
Sensibilidad en los senos, a veces calientes al tacto, hinchazón, a menudo con bultos duros en el seno, molestias durante la lactancia, enrojecimiento de la piel, fiebre, escalofríos y malestar general.
Recomendaciones
-Amamante con frecuencia. Mantener un horario flexible y alimentar a demanda del bebé ayuda a regular la leche. Pero si el bebé quiere dormir mágicamente toda la noche o si está lejos del bebé, la extracción de leche puede ayudarle a no pasar demasiado tiempo entre tomas.
-Use un sostén cómodo. Los aros pueden causar presión y obstruir los conductos.
-Lleve una dieta nutritiva y descanse lo suficiente.
-Cambie de posición con frecuencia al amamantar.
-Asegúrese de que el bebé tenga un buen agarre.
Recomiendo la lectura del libro Dar de Mamar es Amar de Gloria Narváez Abanto, se puede descargar gratis en perezalbela.pe
TE PUEDE INTERESAR:
La columna de Pérez Albela: ¿Por qué es importante reducir la inflamación?