Las propiedades del magnesio son muchas. Es un mineral que ayuda a prevenir diversas enfermedades, está indicado especialmente para el corazón, el sistema nervioso, la depresión, aumenta el rendimiento del ejercicio, reduce la presión arterial, tiene efectos antiinflamatorios, disminuye la resistencia a la insulina, previene las migrañas y mejora los síntomas premenstruales, pero poco se ha hablado de su efecto antiviral.

Un reciente estudio, publicado en medRxiv en mayo de 2020, muestra que una combinación de las vitaminas D3, B12 y el mineral magnesio, fácilmente disponibles y de bajo costo, pueden reducir la progresión del COVID-19 a etapas graves. La lesión viral directa no es el único actor de este mal, también lo es la hiperinflamación que las citoquinas proinflamatorias producen (tormenta de citoquinas). El magnesio y los otros suplementos antes mencionados reducirían esta actividad proinflamatoria.

El magnesio promueve las funciones de la vitamina D, actuando como cofactor en múltiples enzimas involucradas en el metabolismo de la vitamina D, mientras que también tiene actividad broncodilatadora y vasodilatadora independiente. La vitamina B12 mejora la salud de las bacterias intestinales, que a su vez es vital para un sistema inmunitario activo y eficaz. Todos son seguros y bien tolerados por los pacientes.

En 2013 la revista Nature señalaba que el magnesio regula la inmunidad antiviral y es un mineral esencial que la célula Natural Killer (Asesina Natural) usa para destruir a otras células infectadas por diferentes patógenos.

El Dr. Alan Gaby, en su libro Magnesio, nos dice que este es necesario para la síntesis de anticuerpos, para la destrucción de Invasores extranjeros y para reforzar el sistema inmunitario. La recomendación de magnesio es de 400 mg diarios.

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