Sobrino, la situación de las extorsiones sigue siendo muy grave. Miles de pequeños empresarios son amenazados o atacados todos los días, impedidos de ganarse la vida dignamente. ¿Y el Gobierno? Nos dice que exageramos. No exageramos: los casos de extorsiones y secuestros han aumentado un 80%. ¡Obviamente nos sentimos extremadamente inseguros! Casi un tercio de los peruanos cree que podría ser víctima de extorsión en los próximos 12 meses. Esto afecta nuestra integridad, así como los costos y la posibilidad de operación de las empresas.
Uno de los sectores más afectados en este momento es el transporte, especialmente en Lima Norte, donde ocurrió el paro. Las empresas de transporte destinan alrededor del 6% de sus gastos a seguridad. ¡Gastan más que las del comercio, la construcción o los restaurantes! Y como el transporte impacta a todos, cuando hay paros todos enfrentamos problemas, aunque entendemos perfectamente sus reclamos. Es momento de que las autoridades se tomen más en serio este asunto, en lugar de concentrarse en otros temas y solo pretender contentarnos con estados de emergencia que ya sabemos que no funcionan. ¡No más indolencia!
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